¡Buenos días mundo! La vida sabe mejor cuando estás de vacaciones, solo por el mero hecho de saber que durante 9 días no vas a pisar la oficina y verle la cara a esa zorra que te amarga la existencia. Sí, no son muy largas las vacances de este año, pero en octubre me voy a los USA así que tampoco nos quejaremos, ¿no?
Ahora mismo estoy en modo happy, escuchando una playlist de Spotify que es una absoluta generadora de buen rollo. He desayunado tranquilamente mientras leía y esta tarde me voy a ir a dar un bañito y a tomar un poco el sol. Vamos, que aunque esté en Madrid sin planes de playa me importa cero. Además, ya no falta nada para el lunes…
Y pronto os contaré buenas noticias!! Ahora voy a disfrutar un poquito de la mañana (y a poner una lavadora, que es que hay contároslo todo leñe…). Os dejo con el monólogo de esta semana y una bonita canción de John Legend, artista que para mí es muy especial por su All of me, en colaboración con The Roots. Se llama Humanity (love the way it should be). Espero que os guste! ;)
Hasta cierto punto, la medicina es una ciencia. Yo diría que también es un arte. Los médicos que ven la medicina sólo como una ciencia no te convienen cuando tengas una hemorragia o cuando tu hijo grite de dolor. Los clínicos se guían por las normas, los artistas por su instinto. Los artistas sienten tu dolor y se desviven por detenerlo. En las medidas extremas acaba la ciencia y empieza el arte.
La cirugía es extrema. Te abrimos el cuerpo, le sacamos partes y volvemos a meter lo que queda. Está bien que la vida no venga con un bisturí porque, si así fuera, y nos doliera algo, cortaríamos y cortaríamos y cortaríamos. La cuestión es que lo que quitamos con un bisturí ya no vuelve. Así que, como decía, eso es bueno.
Anatomía de Grey, temporada 7, capítulo 11
Una pequeña parte del mundo 